AUTOPSIA (1973)

viernes, 29 de diciembre de 2017















Uno de esos títulos un tanto oscuros y a medio camino entre el Mondo y el film dramático que se puso , hasta cierto punto de moda en una época de nuestra historia cinematográfica, y donde se apelaba de manera directa al morbo con ínfulas trascendentales , mientras se narraba una historia relacionada con la muerte y la inquietud que esta suscita en el ser humano. 
 La cosa comienza ni más ni menos que en Vietnam. En plena guerra, un corresponsal interpretado por juan Luis Galiardo, filma las atrocidades que allí suceden. Entre toda la hecatombe de violencia y destrucción se nos muestra un nacimiento que parece ser o representar una chispa de esperanza en ese tremendo escenario desolado.  Finalmente el propio periodista resulta gravemente herido en uno de los tiroteos y regresa a España para recuperarse. 


Allí empieza a divagar sobre lo eminente y cercano de la muerte y decide rodar un reportaje donde entrevista a personas como Felix Rodriguez de la Fuente, el escritor José Maria Pemán o los recientemente fallecidos Palomo Linares  y Angel Nieto; y en definitiva a personas que de una manera u otra desempeñan trabajos de riesgo y que están en contacto más o menos directo con la muerte. Paralelamente se nos narra una historia de amor, algo extraña e innecesaria, entre Antonio Mayans y Montserrat Julió (también fallecida este mismo año..) la Cantudo , que también hacen acto de aparición, le da el toque más dramático al conjunto, completándose el reparto con el ya mítico Jack Taylor; como médico forense. 

 Como colofón, el prota decide observar y documentar una autopsia real en vivo. Las imágenes de archivo de Vietnam , solapadas al inicio de la peli con el material cinematográfico “nuevo” y lo que sospecho que es una autopsia de verdad filmada en toda regla, le otorgan al film un aire a lo “Frankenstein cinematográfico” de lo más curioso. 


 
 A la par, un montaje caótico y más bien confuso repleto de flashbacks y de voces fuera de campo , y ya tenemos un producto muy de su momento, que visto hoy resulta de lo más añejo y trasnochado, llegando incluso a plantearse la moralidad de la , por aquel entonces novedosa píldora anticonceptiva. 
 Por momentos algo repulsiva, y por momentos simplemente algo aburrida y repetitiva, la peli se poya en el discurso interno del personaje de Galiardo que suena de fondo, como voz en off. El corte filosófico trascendental de la peli visto hoy día queda algo ridículo, aunque ya en parte la peli plantea muchos momentos y diálogos en clave de humor.

 Una película que resulta reflexiva e invita a pensar, especialmente hoy dia en que la gran mayoría de implicados (Galiardo incluido) ya no se encuentra entre nosotros. 




2 comentarios:

Anónimo dijo...

No me parece.creo que en si la muerte es algo que el donde sea te hace pensar pero está es innecesaria en su retórica poética de jardín de infantes. Yo le puse 3.5 de 10 sólo por la autopsia snuff .

Anónimo dijo...

autopsia snuff?? madre mia, eso es como decir "suicidio asesino". en fin..