UNA BALA EN KUIPER (2016)

miércoles, 16 de agosto de 2017

 En esta ocasión traemos un cortometraje moderno que reivindica esa manera de hacer cine de ficción, con medios artesanales, bajo presupuesto y mucho amor al arte.

Dirigido por Jorge Aguirre Pérez, "Una bala en Kuiper", comienza situándonos en el año 2650. En mitad de una partida de "ruleta rusa" interestelar. 
 En ella varios personajes se enfrentan a la muerte por un misterioso maletín rojo. Entre ellos se encuentra un feo y desagradable cyborg a la vieja usanza, que quiere quedarse con el premio engañando a los contendientes. Además de un curiosísimo perro alienígena de muchos ojos. 
 Tras morir todos , el villanesco ser se hace con el "McGuffin" de la historia y trata de huir pero es entonces cuando aparece la hija de uno de los personajes fallecidos, que ha logrado encontrar el paradero donde se celebraba la macabra competición, y logra acabar con el sintético mafioso y hacerse con el maletín, llevándose consigo a la "mascota"de su familiar fallecidol quien la reconoce nada más verla...
 Una grabación de su familiar, a modo de voz en off , va explicándole a ella y a los espectadores, como se ha llegado hasta esa situación. 

Su nave se aleja hacia el horizonte galáctico al más puro estilo western...
 Una refrescante propuesta de escasos 18 minutos que homenajea cosas tan dispares como el "Neo noir", los films de ciencia ficción espacial, la Sci Fi blanda y sobretodo a la vieja escuela de los FX , con geniales animatronics, stop motion, decorados de cartón piedra, y rudimentos varios que nos remiten a la maravillosa cutrez de aquella serie B y Z setentera y ochentera que tanto nos gusta por estos lares. 

Deberían de hacerse más cosas como esta, y desde "Cine Serie Z" lo reivindicamos. 




1 comentarios:

Loskru dijo...

Estimado Mr. Ed, nos congratula que hayas dedicado está magnífica entrada a "Una bala en Kuiper" en tu blog!, entre otras cosas porque has captado la esencia del cortometraje tal como es, y lo que en el mismo se ha pretendido plasmar, con sus influencias, estéticas, mezcla de (sub-) géneros, y acentuando sus muchos aciertos ;). Es serie Z, yeah!, no podía ser de otro modo con los medios disponibles, aunque no por ello se ha tratado de una producción exenta de ingenio, esfuerzo, gasto económico, e innumerables horas de trabajo... como bien aprecias en tu texto. Tu crítica denota, no solo buen gusto, también que eres conocedor de estos géneros. La serie B (o Z!) al final es algo muy relativo: muchos Blockbusters (sobre todo estivales) actuales lo son... obviamente los efectos visuales que puede hacer un solo individuo y con ínfimo presupuesto no son lo mismo que un equipo de 500 personas y presupuestos multimillonarios. Pero sus temáticas, planteamientos, diálogos poco creíbles y personajes no muy allá definidos, lo denotan. Si llega el momento de poder hacer uso de un CGI aséptico y foto-realista, se hará en pos de la producción!, pero por ahora la personalidad y el alma que el añejo stop-motion y el cartón-piedra (como bien apuntas) es lo que nos gusta. Y en cuanto a este look retro, son legión los aficionados de hoy día que lo demandan.

Un saludo!

Jorge.